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La Plataforma por la Dignidad de la Atención Primaria, que apoyan los cinco colegios de médicos de Castilla-La Mancha, llama al personal sanitario y a los pacientes a concentrarse, el próximo 7 de febrero, a las 11 de la mañana, en las puertas de los centros de salud del Sescam.
La Plataforma por la Dignidad de la Atención Primaria da el paso de las movilizaciones después de enviar dos misivas al presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page. Al no obtener respuesta, los médicos han decidido pasar de los intentos fallidos de diálogo a las movilizaciones. Y es que la situación, a juicio del portavoz de la plataforma, Jesús Simancas, no puede esperar.
La plataforma reivindica más tiempo con sus pacientes y más inversión en los centros de salud
Los médicos de Familia necesitan más tiempo con sus pacientes. Y para ello, necesitan más personal y tecnología. De hecho, si los centros de salud fueran más resolutivos, si pudiera recurrir a los ecógrafos, restarían presión asistencial a los hospitales.
La plataforma nació en Ciudad Real de forma espontánea, como ha ido ocurriendo en numerosas provincias y comunidades españolas. Pero es ahora cuando estas movilizaciones están tomando forma y coordinándose.
Por la Dignidad de la Atención Primaria cuenta con el apoyo de los colegios de médicos y sociedades científicas
En Castilla-La Mancha, la movilización cuenta con el apoyo de los colegios de médicos, así como de Sindicato Médico CESM y sociedades científicas.
El movimiento advierte de la gran presión asistencial. La falta de inversión en los últimos años, ha dado lugar a cupos desbordados y consultas en ocasiones con más de 40 y 60 pacientes al día.
El movimiento ha tratado de reunirse, sin éxito, con García-Page
Además, los compañeros tienen que asumir los pacientes de los médicos ausentes. Mientras tanto, facultativos que terminaron el MIR sienten el desánimo de trabajar días sueltos. Todo esto -ha recordado Simancas-, unido a la pérdida de días por formación, la falta de dotación tecnológica en los centros o que no se compense ni se reconozca el trabajo, ha favorecido que parte de colectivo médico se sienta “quemado”.
De la esperanza a la indignación
Unidos por la Dignidad de la Atención Primaria
